El Gobierno de Castilla-La Mancha ha declarado la ermita de Nuestra Señora de la Antigua y de San Illán de Cebolla como Bien de Interés Cultural, con categoría de ‘Monumento’. (Ver noticia)
Situada a tres kilómetros de la villa es una bella ermita de una sola nave. En ella se venera la imagen de la Virgen de la Antigua, patrona de Cebolla.
Edificio de planta de cruz con acceso principal desde su zona sur. Tiene espadeña a sus pies y galería porticada al este que continúa en la fachada principal. Está realizada en fábrica de ladrillo cocido con argamasa. En la entrada existe un atrio con una serie de arcos de medio punto cerrado a ambos lados con arcos puntados.
En la Ermita se conserva la imagen de la Virgen de la Antigua, una talla de madera policromada que representa a la Virgen sedente con el niño Jesús sobre sus piernas bendiciendo conforme a los gustos iconográficos del románico. La talla data del siglo XIII y fue rehecha en 1742 por Luis Corsón. Está adornada con corona, el sol, el resplandor y la luna.
Destacan en la ermita los azulejos que representan la vida y milagros de San Illán, que datan del siglo XVIII. En ellos se relata la aparición de la Virgen a San Illán, señalándole donde debía clavar su ahijada para encontrar agua; la historia de como resucita el caballo de su amo; la de como unos campesinos se quejan al amo de que San Illán no labra; cuando es espiado y comprueba que labra más que los demás; San Illán labrando con unos toros bravos a los que amansa; la leyenda de un toro rabioso descubre el sepulcro de San Illán.
Encontramos también un azulejo con la representación del milagro de la fuente, el retablo de la Virgen realizado por Francisco Álvarez Lorenzana que data del siglo XVIII y diferentes cuadros llevados para dar gracias de diferentes sanaciones como el de los niños salvados de ahogarse en el río Tajo.